Ernesto
Rivera Rodríguez
El
movimiento magisterial en Guerrero, ha entrado en una etapa de
acuerdos-desacuerdos internos, en donde el vértice del pasmo magisterial ha
subido de tono y movido sus ejes cardinales hacia fuera del mismo, ahí donde Gonzalo Juárez Ocampo y Minervino
Morán, la “medula operadora” de este vodevil ha dado un vuelco de 180 grados
para convertirse en un símil de sí mismo, dejando atrás, pero muy atrás los
intereses verdaderamente magisteriales que desde un principio su tono fue de
evidente fuera de lugar, cuando además son presionados por la jerarquía del
movimiento político al que pertenecen: Nueva Mayoría, del PRD, que comanda
Evodio Velázquez Aguirre.
Luego
entonces, como va a continuar este vodevil, que literalmente ha quedado fuera
del control del mismísimo magisterio para devenir en un formulismo a final de
cuentas político. Su solución será política, no magisterial.
Hoy
cerca de un mes después de enarbolar
demandas “bizarras” para pretender cambiar a su modo la reforma educativa, ya
constitucionalizada –si cabe el terminajo-, reforma y fondo que la inmensa
mayoría de los movilizados plenamente desconoce, además de enarbolar banderas
laborales que muy lejos están de concebir, conocer y entender, el movimiento
magisterial en Guerrero y “anémonas que se le adhirieron” para engordar la
turba mal informada, se ha convertido en un engranaje de la mediatez política
local, y cuyas demandas están a punto de ser resueltas por voces y mandos muy
por encima de ellos, ya convertidos en simple y llanamente marionetas de
intereses superiores a las alicaídas demandas sin futuro alguno, así las cosas.
Ni
el respetable Congreso Local, haga lo que haga, dictamine lo que dictamine, ya
dividido aún en más parcelas de intereses del gobernador del Estado, Ángel
Aguirre Rivero, como el llamado “Bloque Plural”, integrado por los diputados
del PRI, PAN, Verde Ecologistas y Panal, cuando ha entendido –si es que eso
puede hacer- que la triada política que lo llevo al poder está convertida en
polvo, polvo de aquellos lares que lo encumbraron, hoy se han convertido en
armas que pretenden moverle el piso, y
la gubernatura, de manera por demás infantil, de los berrinches demagogos de menos de la vigésima parte del
universo magisterial del SNTE en Guerrero, denominada Coordinadora.
Porque
no son más los que metidos y amontonados en el movimiento de izquierda
aglutinados en la Coordinadora, los que reman contra corriente con volvemos a
repetirlo, con demandas infantiles y como tales pretenden que se oficialicen,
como cuando de la humedad brotan los hongos, luego entonces no serán ellos los
que logren llegar al final de este movimiento a sentarse en la mesa de los
repartos de posiciones político administrativas, sino los dueños del balón.
Primero los de Nueva Mayoría, después el resto. Si queda algo. Aguirre puede
que no concluya su mandato, pero no será este movimiento quien lo mueva, a
ellos mismos tampoco les conviene esto. Se quedarían sin nada y sin ninguna
oportunidad.
email:gernestorivera@gmail.com