Vladímir Putin pone el ejemplo al mundo

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En las nuevas directrices de la política mundial. Rusia y China ponen el ejemplo de una posibilidad de paz y conocimiento asertivo. Ya que ipso facto, China invitó a dar una respuesta positiva y racional hacia el conflicto sirio. También lanzó la sugerencia de que se celebre una segunda Conferencia Internacional en Ginebra. Así que el gobierno chino sentenció que han emergido importantes oportunidades para relajar las tensiones en Siria. Esperamos que todas las partes puedan aprovecharlas. Mientras tanto, uno de los aliados de EUA, entre otros, me refiero al gobierno francés, indicaron que la opción militar permanece abierta si la vía diplomática falla.

Vladímir Putin, presidente de Rusia, ha conseguido lo que muchos podrían imposible. Estropear el plan de Barack Obama, alto mandatario de los Estados Unidos, así como de quienes lo secundaban: Francia, Turquía, Arabia Saudita, Australia, y otros que no se animaban al cien por ciento, Japón, Gran Bretaña y Canadá. Aunque todavía faltan algunos arreglos ante la ONU y los gobiernos involucrados en esta demostración de fe, la acción rusa se impuso.

Pues Rusia ha convencido a Bashar al Assad, presidente de Siria, para entregar los arsenales y mantenerlos bajo el control internacional, y comentó que la decisión tomada no tuvo nada que ver con las amenazas bélicas de Estados Unidos. Bashar comentó que la decisión se debe a las negociaciones con Rusia, aparte que Siria dirigirá a la ONU los documentos necesarios para firmar un acuerdo sobre las armas químicas.

Subrayó que Siria está colocando sus armas químicas bajo control internacional debido a Rusia. Las amenazas de Estados Unidos no influyeron en la decisión.

Rusia afirmó que Siria se adherirá a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas en función de un plan que los jefes de la diplomacia ruso, Serguei Lavrov, y estadunidense, John Kerry. El modelo internacional para resolver conflictos, aparte de intereses intrincados, en los cuales implican dogmas religiosos, revanchas castrenses e historia, no son las agrupaciones de élite, el G-20 ha quedado exhibido y Vladímir Putin, podría considerarse en un futuro inmediato, como candidato fuerte para el Premio Nobel de la Paz. Y sería, muy bien ganado.