Alex Islas
México
sin duda siempre ha sido un país bastante violento, basta revisar nuestra
historia para darnos cuenta de las muchos y variados episodios de violencia en
este país; mucho se habla hoy en día de sicarios, narcotráfico y delincuencia
organizada, pero un tema que ha quedado muy olvidado es el de los asesinos en
serie y México vaya que ha dado materia para ello, pero hay que definir qué es
un asesino en serie; el criminólogo canadiense Robert Hare define al asesino en
serie como: “Alguien que comete tres o más asesinatos durante un extenso
período con un lapso de enfriamiento entre cada crimen. En medio de sus
delitos, ellos parecen bastante normales”.
En
México se ha tenido conocimiento de varios asesinos seriales el primero de
quien se tiene un registro fidedigno es de Francisco Guerrero “El Chalequero”,
su apodo se debe a lo mucho que cuidaba su apariencia y al buen cuidado de su
apariencia personal, Guerrero fue acusado de matar a 20 prostitutas entre 1880
y 1888. Guerrero abordaba a sus víctimas cuando les pedía sus servicios
sexuales y al no quedar satisfecho las golpeaba, violaba y degollaba, después
lanzaba los cadáveres en Río Consulado, a pesar de que durante años aparecieron
cuerpos de mujeres en el río la policía no lograba dar con el asesino quien era descrito como “guapo, galante y
pendenciero”, cuando lo arrestaron fue sentenciado a muerte, el entonces
presidente Porfirio Díaz redujo su sentencia a 20 años de prisión, pero en 1904
el nombre de Francisco Guerrero apareció por error en una lista de presos
políticos indultados y salió en libertad para restablecerse en la Ciudad de
México. Cuatro años después volvió a matar, en esta ocasión a una prostituta de
casi ochenta años con el mismo modus operandi que utilizo en sus primeros
crímenes, Guerrero fue encontrado cerca de la escena del crimen con las manos
ensangrentadas, fue condenado a muerte y apresado en el Palacio Negro de
Lecumberri, falleció de una embolia a principios de noviembre de 1910, pocos
días antes de que estallara la Revolución Mexicana. Más o menos durante la
época ocurrieron en Londres los asesinatos perpetrados con Jack “El
Destripador” (de quién hasta hoy se desconoce su identidad) y la prensa
londinense se hablaba sobre un “Chalequero inglés”.
Otro
asesino en serie mexicano es Gregorio “Goyo” Cárdenas mejor conocido como “El
Estrangulador de Tacuba”, como muchos
asesinos en serie Gregorio Cárdenas tuvo una madre que lo dominaba y humillaba,
además de torturar desde niño animales pequeños como pollos y conejos; Cárdenas
fue un alumno sobresaliente estudió becado por Pemex, Ciencias Químicas y
asesinó a cuatro mujeres, tres de ellas prostitutas entre los meses de agosto y
septiembre de 1942, asesinaba a sus víctimas por la espalda y una vez que
estaban distraídas observando el laboratorio que tenía Cárdenas en su casa. El
doctor Alfonso Quiróz Cuarón determinó la condición de Gregorio Cárdenas como:
“causa de una encefalitis en su niñez, misma que ocasionó una infección en el
sistema nervioso central, destruyendo tejido no reproducible”. El caso del
“estrangulador de Tacuba” bastante
surrealista por decir algo, ya que Cárdenas se convirtió en el primer asesino
en serie ovacionado de pie en la Cámara de Diputados debido al “ejemplo de rehabilitación
criminal”. Pasó 34 años en Lecumberri en donde se dedicó a pintar, escribir y
estudiar derecho. Falleció a principios de agosto de 1999.
José
Luis Calva Zepeda “El Caníbal de la Guerrero” asesinó, torturó y comió partes
de tres mujeres, una prostituta y dos novias, fue detenido el 8 de octubre de
2007, es uno de los casos que más ha conmocionado a la opinión pública mexicana
debido al especial sadismo de Calva Zepeda con sus víctimas. Dieron con el
asesino debido a que se reportó la desaparición de su última novia. En su casa
además de encontrar el cuerpo descuartizado de una de sus novias se encontraron
restos del antebrazo de una de sus víctimas en un sartén y otros restos de
carne humana en el refrigerador, a pesar de ello el “Caníbal” siempre negó la
necrofagia (incluso tenía entre sus pertenencias una foto del histrión Anthony
Hopkins en su papel de Hannibal Lecter). Este asesino que incluso tenía
pretensiones de poeta se suicidó a principios de diciembre de 2007, los
familiares de las víctimas pidieron ver el cadáver de Calva Zepeda para
asegurarse de que estaba muerto, la hermana del “Caníbal” les pidió perdón de
rodillas.
Y
estos son solo algunos de los asesinos seriales más famosos de México, sí
quieren saber más se anexan las diferentes páginas de las que saqué la
información para este artículo. La criminología es un campo muy interesante, lo
mucho que ayudaría que en este país se estudiara más el tema.
REFERENCIAS:
Rozo
N. LA RESOCIALIZACIÓN EN UN PSICÓPATA
ASESINO EN SERIE: UN FIN PENAL OBSOLETO Y ARCAICO. 2011
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