LA RUEDA DE LA FORTUNA : Alfredo Sarabia Radilla
Políticos “chapulines” amenazan nuevamente con seguir
manteniéndose en el poder, o mejor dicho, quieren afanosamente seguirse
manteniendo del poder público.
Estos especímenes andan atareados, accesibles y muy
sonrientes en busca de los votos que les permita continuar aferrándose a la
“dolce vite” que han saboreado y disfrutado.
A los referidos políticos, que solo quieren el poder por el
poder, los podemos observar en todos los partidos, pero esta condición se torna
más notoria, en aquellos partidos más grandes, como el PRI y el PRD…
y ahora
también se da, en el MC.
La Ley Electoral consiente esa situación, no la regula en lo
absoluto y guste o no, se da sin tapujos, y la única condición que se debe
tener para oso título”, es estar desprovisto de verguenza y ser de lo más
cínico. Por tanto, se puede decir categóricamente, que ser “chapulín”, es una
cuestión que a todas luces raya en la inmoralidad y en él descrédito. Sin
embargo, estos epítetos no parecen tener ninguna consideración de los que
llevan “puesto ese traje”.
En nuestro estado de Guerrero, esta acentuación se ve
marcadamente, en el PRI, en el PRD y en el MC, pues de hecho, son los que han
recibido mayor votación…hasta ahora, pareciera que esos especímenes han
encontrado el lugar ideal para sus acomodos personales, pues sin un resquicio
para los escrúpulos, avasallan a quien sea, y se cubren con el manto del
cinismo y la desvergüenza, para conseguir su egoísmo.
Así, esos malévolos vividores de la política, no han dudado
en hacer malabarismos que solo se entienden y explican en la pobreza mental
ideológica que conlleve a traer beneficios para la colectividad, y en todo
caso, son pocos los chapulines que se esmeran por hacer un buen trabajo en su
función, aparentemente.
Aunque habrá que decir, que en estos años, se pusieron a
prueba a los diputados, tanto federales, como a los locales, cuando les
mandaron las llamadas reformas estructurales para su aprobación, entre otras,
la reforma educativa, la fiscal, la energética, todas nocivas para la población
de a pie, lo que generó y ha generado hasta la fecha, descontento en el citado
sector en general.
En esos eventos legislativos, se observaron a los chapulines
de hoy, votando a favor de las encomiendas legislativas nefastas que tanto han
dañado al mexicano de menor rango en la economía, ya que estos, o eran
diputados federales, o bien eran diputados locales y que en este proceso
electoral, sin siquiera sonrojarse, ni tener vergüenza alguna, piden el voto a
su causa, para seguir zarandeándose de
la ubre presupuestal, sirviendo al amo, o sea, a la Presidencia de la
República.
En el PRD, tienen a Sebastián de la Rosa Peláez, como su
máximo exponente en esto de brincar de un puesto a otro (sin perder ritmo) y a
Héctor Astudillo Flores, en el PRI, de similares condiciones a las del
perredista convenienciero.
Otros chapulines son Silvano Blanco de Aquino (este salió
más caón, pues tuvo que cambiar de partido con tal de ser candidato a diputado
local; brincó del PRD al MC). La lista de insectos saltarines no termina con
estos, pero se mencionan porqué son los más voraces…
HASTA PRONTO.
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