Estudios y análisis sobre los hallazgos referentes al colorido en esculturas de la antigüedad en Europa y Asia, así como de Mesoamérica componen el catálogo de la exposición El color de los dioses. Policromía en la antigüedad clásica y Mesoamérica, que se encuentra en exhibición en el Museo del Palacio de Bellas Artes, en el marco del Año Dual México-Alemania 2016-2017.
En el Área de Murales del Palacio de Bellas Artes, la publicación integrada por más de 30 textos inéditos de especialistas e investigadores, provenientes de diversas disciplinas, fue presentada por María Luisa Durán, docente del departamento de Arte de la Universidad Iberoamericana, y Clementina Battcock, investigadora del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
La historiadora del arte calificó el catálogo como extraordinario. Enfocándose en la sección de arte clásico, indicó que está constituido de 21 capítulos, lo que, dijo, es una información que podría ser un parteaguas en la bibliografía respecto al tema de la policromía en castellano, en vista de que la mayoría de las publicaciones que se han realizado está en otros idiomas, especialmente el inglés.
Comentó que los textos casi presentan un trabajo monográfico, ya que se enfocan al estudio de piezas en particular, pero también abordan temas de interpretación y teoría crítica, permitiendo al lector adentrarse con profundidad en las posibilidades cromáticas de las piezas.
María Luisa Durán destacó “la fructífera” aportación del arqueólogo alemán Vinzenz Brinkmann en 12 capítulos del catálogo, investigador que desde la década de los ochenta ha publicado un sinfín de textos sobre la policromía de la antigüedad clásica. “Esta publicación se convierte en lectura obligada, ya que hay pocos textos en México de este autor y calidad para quienes se quieren adentrar al tema pictórico”, indicó.
Expresó que la temática es controversial, porque la academia más conservadora tiene todavía sus bemoles. “Son 200 o 300 años de considerar que la escultura específicamente las de los periodos arcaico y clásico es blanca. Evidencias científicas nos dicen, desde su descubrimiento a partir del siglo XVIII, que tenían color y que con el paso del tiempo y las nuevas restauraciones lo fueron perdiendo.
“Esta exposición y el catálogo permite mostrarnos la presencia e importancia del color en las obras que siempre hemos considerado blancas, las piezas, con el color, adquieren matices nuevos y valores de interpretación”, apuntó.
Por su parte Clementina Battcock, quien se refirió a la sección referente a Mesoamérica en el catálogo. Calificó como magnificas las fotografías que ilustran y acompañan los textos. “Sin lugar a dudas esta selección fotográfica dialoga explícitamente con los trabajos, no son meramente ilustrativas, es otro texto visual que posee su hilo narrativo”.
La investigadora del INAH apuntó que la exposición El color de los dioses abre una ventana para leer con una mirada inteligente a mundos diferentes que comparten una preocupación por dejar huella en un lenguaje cromático y visual.
“Quien se acerca a este catálogo dispone de una prolija exposición y análisis de diferentes estudios que dan cuenta de la relevancia e importancia del color en Mesoamérica. Su utilidad es en verdad grande, pues el lector quiere entrar en contacto con una serie de elementos constitutivos, técnicos y simbólicos de la antigua realidad desaparecida por la conquista española en estos territorios”, puntualizó.
Entre los autores que se pueden leer en esta sección están: Adolfo Mantilla Osornio, Julio Adrián Pérez Rivas, Bertina Olmedo Vera, Patricia Ochoa Castillo, Rebeca González Lauck, Martha Carmona, Stephen Castillo Bernal, Daniel Juárez, y María Teresa Uriarte.
El catálogo de la exposición homónima El color de los dioses. Policromía en la antigüedad clásica y Mesoamérica, inaugurada el pasado 11 de octubre y que estará abierta al público hasta el 8 de enero de 2017, puede adquirirse en la tienda del Palacio de Bellas Artes.
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