Julio César
Robledo López
Para establecer la Justicia como valor fundamental de la sociedad mexicana, no basta el esfuerzo transformador de las condiciones morales de la sociedad, no basta el crecimiento económico. Es indispensable dar prioridad efectiva al funcionamiento del estado de derecho, y no solo modernizando la legislación, sino exigiendo eficacia y honestidad en la administración de justicia, y en general en la aplicación de la ley.
Tenemos que lavarnos la vergüenza de que el pueblo
mexicano no confié en sus policías, en sus agentes del ministerio público, y en
sus juzgados. Una tarea ineludible para cumplir con la demanda de renovación
moral de la sociedad, es sanear con profundidad, con vigor y con valor todas y
cada una de las fases de la administración de la justicia, para evitar con ello
el surgimiento de cuerpos armados populares, que corrompan el equilibrio de la
legalidad, y atropellen los derechos inalienables del ciudadano, empero, ello
no se solucionara con reformas al cuerpo normativo, sino como lo he dicho con
la aplicación irrestricta de la ley.