Grrrrrrraaaaaruuu…
De gobernadores, desastres y miserables
Grrrrrrrr… Acapulco es el municipio con mayor número de pobres alimentarios que hay en
México como bien reconociera Rosario Robles Berlanga, secretaria de Desarrollo
Social.
Grrrrrrrr…
Acapulco, que otrora fuera el puerto paradisíaco de México, mejor conocido como
La Perla del Pacífico por excelencia, es
hoy blanco de un sinfín de tragedias. A los desastres naturales más comunes
como lo son sismos de alta magnitud, huracanes, tifones, etc., habrá que
sumarle el desempleo, la pobreza y sobre todo, la corrupción y la delincuencia
exacerbada. Las condiciones actuales del puerto representan no sólo la
consecuencia lógica del abandono por parte de los tres niveles de gobierno sino
también, el resultado de una política pública perversa que hoy el
Revolucionario Institucional (PRI) quiere extrapolar a todo el país.
Grrrrrrrr…
Porque los desastres naturales duelen más donde menos recursos y organización
hay; incluso pareciera que la inundación se hubiera dado en Haití si lo medimos
por sus consecuencias. Existen recursos para hacer frente a este tipo de
tragedias como lo ha habido cada año por parte del Fondo de Desastres Naturales
y muchos otros; pero si éstos no son supervisados para que se lleven a cabo
trabajos de calidad, los mismos problemas se presentan de forma periódica.
Grrrrrrrr…
La corrupción fomenta así el bizarro negocio de la tragedia, el que les
garantiza recursos a las empresas pertenecientes a la clase política tener
actividad cada temporada, arreglando los defectos intencionales que no se
corrigieron en la anterior.
Grrrrrrrr…
En Acapulco la formación superior de calidad simplemente no existe a pesar de
contar con más de un millón de habitantes según INEGI. Quien desee tener una buena
formación académica, deberá mudarse a otro municipio con las dificultades que
ello implica. Sus instituciones públicas no destacan mientras que las privadas
son de muy baja calidad. Tampoco fomentan el emprendurismo y es que no les
interesa tener nuevos empresarios ni generadores de empleo. Así garantizan la
conservación del statu quo que mantiene a 9 de cada 10 habitantes allí en
condiciones de pobreza y vulnerabilidad, candidatos perfectos para ocupar las
vacantes que requiere el sector turístico.
Grrrrrrrr…
El puerto está ubicado al Sur Sureste del territorio mexicano, en el Estado de Guerrero, mismo que forma que junto con sus vecinos
Oaxaca y Chiapas complementan el cinturón de mayor pobreza en México, con
municipios que viven con Índices de Desarrollo Humano equiparables a los de
África Subsahariana a pesar de la abundancia de recursos naturales.
Grrrrrrrr…
La muestra más terrible de la descomposición social del puerto es la
delincuencia. Tan sólo el año pasado Acapulco se convirtió en la 4ta ciudad con
mayor número de homicidios dolosos en el mundo, a pesar de no ser,
aparentemente, una región que se encuentre en guerra. La disputa de cárteles
por el control de territorio se torna cada vez más cruenta a la vez que
mientras se engrosan las filas de estos grupos, mayores son las necesidades de
financiación para su subsistencia.
Grrrrrrrr… La
estrategia que eligieron las actuales autoridades de los tres niveles de
gobierno para ‘recuperar’ el puerto de la creciente delincuencia fue convencernos
a base de spots televisivos, discursos triunfalistas y censura de la prensa de
que nuestra situación no es grave. Y la estrategia de ocultar la verdad
mientras no se mueve un solo dedo para que las condiciones mejoren, agrava la
situación.
Grrrrrrrr… Ahora
no sólo la delincuencia es impune sino quienes habitamos en Acapulco, nos
volvemos apáticos. Acostumbrados a caminar entre cadáveres y balaceras
con la misma naturalidad que lo hacemos cotidianamente entre mendigos y niños de la calle, nos
consolamos repitiéndonos frases como
‘por algo lo mataron’ o ‘andaba en malos pasos’, sabiendo en su interior que la
mayor parte de las víctimas eran inocentes. Es tanta la negación que incluso se
nos escucha tristes los ‘por algo lo
secuestraron’, ‘por algo lo asaltaron’…
Grrrrrrrr… Los
acapulqueños tenemos razones de sobra para no confiar en las autoridades pero
tampoco lo hacemos en sí mismos. La única forma de componer el tejido social –
creo yo- es dejando que la misma sociedad se organice; pero nos hemos creído el
cuento del individualismo, el de buscar el bienestar para sí antes que el de
los demás, ese que nos repite que nuestras acciones individuales y el
dedicarnos a lo propio, a no mirar más
allá de nuestra responsabilidad por sí mismo traerá buenas consecuencias. Dicha
mentalidad no sólo nos aleja cada vez
más de encontrar una solución sino que además alienta el consumismo, que es
otra forma de manipularnos.
Grrrrrrrr… La
clase más baja en nuestro puerto, es invisible si bien es la más numerosa. Y es
que esta allí, pero avergonzada, se esconde. La doctrina que nos han inculcado nos
han enseñado que debemos bajar la mirada, salir lo menos posible y desaparecer
rápido de cualquier lugar público antes de ser reconocidos: es por ello que a
las autoridades no les preocupan pues son incapaces de organizarse. Les han
convencido que el valor de las personas está en función de sus posesiones y
ellos no poseen nada; al menos nada de lo que la sociedad de Acapulco aprecia.
Grrrrrrrr…
Al resto de los pobres y de los que poseen carencias sociales les han
convencido de que son clase media. Pero su ingreso es apenas suficiente para la
subsistencia y entre sus necesidades contemplan accesorios para los cuales
necesitan no sólo dedicar más horas al día sino renunciar a ciertas necesidades
básicas, al punto de esclavizarse por darse ese ‘lujo’. Son ellos los
trabajadores perfectos, a los que ponen la zanahoria enfrente. Por ello no les
interesan los problemas sociales, están convencidos que trabajando toda una
vida, como empleados, algún día dejarán de serlo, ‘porque son clase media, no
baja’. Muy tarde se dan cuenta de que no es así, o los años les cansan o al fin
se dan cuenta de que bajo las condiciones en las que viven, jamás lo
conseguirán. En ambos casos suele ser tarde para que comiencen a inconformarse
con el sistema, además que luego de haberlo adoptado y obedecido durante tanto
tiempo, les es más difícil reconocer que vivieron la mayor parte de su vida
equivocados.
Grrrrrrrr…
Los obreros que esclavizaron su mente y renunciaron a cualquier tipo de
organización que les lleve a mejores condiciones son quienes llenan los
bolsillos de la minoría, de la clase rica de Acapulco conformada por
empresarios y políticos, casi siempre siendo ambos y comenzando por un cargo
público antes de emprender.
Grrrrrrrr…
Los delincuentes obedecen a esa misma mentalidad. No hay oportunidades de
empleo y todos quieren ser consumistas, necesitan serlo. En ciudades donde lo
más importante es lo que se tiene y lo que se aparenta, la consecuencia es
lógica. Bajo el capitalismo puro, las formas son lo menos y el suyo lo observan
como sólo un negocio irregular. Cambian su propia vida y venden los años de
vejez por unos años de accesorios. Es paradójico que busquen un auto, buena
ropa, todo ello para verse como mejores personas según las ideas capitalistas
cuando para conseguirlo, tienen que convertirse en los peores de los monstruos…
despojar de la vida a alguien por unos accesorios que ni siquiera acercan a la
felicidad y que sólo son apreciados por gente igual de vacía, es la muestra
clara de que algo se pudrió.
Grrrrrrrr…
Es común que en las tragedias naturales la desesperación lleve a las personas a
hacerse de víveres donde estos se encuentren. Lo que no lo es, es que antes de
buscar los mismos lleven electrodomésticos e ingresen a saquear otras viviendas
con el mismo propósito, mucho menos que lo hagan a tan poco tiempo de haber
transcurrido la tragedia.
Grrrrrrrr…
En el periodo 1994-2015, Acapulco y Guerrero han tenido autoridades de signo
priista e izquierdista. La pregunta es si realmente, ahora sí, serán llamados a
cuentas todos aquellos que otorgaron permisos para edificar en zonas
inundables.
Grrrrrrrr…
Tardó más el gobernador Ángel Aguirre Rivero en exigir que se investigue el
otorgamiento irregular de permisos de construcción en Acapulco, que en recibir
la respuesta de Enrique Peña Nieto.
Grrrrrrrr…
“Solicito al gobernador del estado —reviró el Presidente— realice las
investigaciones y se deslinden responsabilidades que competan al ámbito local,
como el Gobierno de la República hará las propias investigaciones de aquellas
afectaciones o de aquellos permisos sobre zonas federales, que fueron otorgados
indebidamente y que están en el ámbito del fuero federal”.
Grrrrrrrr…
El colmillo retorcido de Aguirre le permitió adelantarse a la exposición de las
pesquisas realizadas por Korenfeld que apuntaban a la necesidad de “analizar
los permisos que se dieron aquí” entre 2002 y 2012, para edificar en zonas
propensas a inundarse, y que “van más allá de las facultades” que tenían las
autoridades.
Grrrrrrrr…
Es decir, un lapso que lo incluye a él como gobernante, no sólo a servidores
públicos “del pasado”. Y una serie de decisiones tomadas en un estado donde él
es la autoridad máxima, aunque con frecuencia —como en el tema del conflicto
magisterial— no actúe como tal.
Grrrrrrrr…
Durante dicho periodo, han gobernado Guerrero René Juárez Cisneros, Zeferino
Torreblanca y el propio Ángel Aguirre, y han encabezado el ayuntamiento
acapulqueño Zeferino Torreblanca, Alberto López Rosas, Félix Salgado Macedonio,
Manuel Añorve y Luis Walton (sin contar los interinatos de José Luis Ávila, en
2010-2011, y Verónica Escobar, en 2012).
Grrrrrrrr…
De constreñirse al lapso 2002-2012 el otorgamiento de los permisos que están
detrás de las inundaciones de Acapulco —no sólo la que actualmente padece el
puerto, sino otras anteriores, como la que se dio en 2007 tras el paso del
huracán Henriette—, habría que investigar la actuación de cada uno de los
funcionarios anteriores, así como la de los representantes de dependencias
federales que tenían la capacidad de facilitar, con su firma, las obras que
modificaron drenes pluviales y cambiaron el cauce de los ríos.
Grrrrrrrr…
Sólo que el antecedente nos traslada al sexenio de 1982-1987 que gobernó
Alejandro Cervantes Delgado. Mismo que durante su mando, allá por el aeropuerto
Juan N. Álvarez, se construyó la Un idad
habitacional Vicente Guerrero 2000, misma que fue adquirida por el magisterio y
funcionarios, mismos que denunciaron en su momento la inundaciones que
registraban sus viviendas cada año en temporada de lluvias.
Grrrrrrrr…
Posteriormente José Francisco Ruiz Massieu, llevó a cabo la construcción de 70 casas
dúplex de la Unidad Habitacional Luis Donaldo Colosio, dejando en claro que la
planeación contemplaba el respeto de los ríos y canales de desague naturales,
evitando la inundación de estas. Al asumir la alcaldía Rogelio de la O Almazán,
a través del primer Síndico Procurador, Manuel Añorve Baños, autorizan las
demás etapas del fraccionamiento, violando los cauces naturales de los ríos.
Grrrrrrrr…
Al cambio de administración con Juan Salgado Tenorio, no le dieron tiempo de
montar en su caballo, al año por instrucciones del presidente Ernesto Zedillo,
fue removido del cargo, supliéndolo Manuel Añorve Baños, durante los siguientes
dos años. Posteriormente asume el cargo Zeferino Torreblanca, quien lleva a
cabo el cambio del Plan de Desarrollo Urbano y al mismo tiempo el Uso de Suelo,
tiempo en que su amigo el presidente Vicente Fox, le pide facilidades para sus
hijastros los que a través de Casas Geo, realizan la mayor parte de
comercialización de viviendas en la zona a través del Infonavit , con campañas como:
“ Su casa junto a la playa”…!Viva en Acapulco!...
Grrrrrrrr…
Por desgracia, Acapulco no es la única ciudad donde esto sucede, ni Guerrero es
el único estado. En todo el país se pueden encontrar ejemplos de asentamientos
irregulares que no llaman la atención mientras no ocurra una tragedia que
provoque la pérdida del patrimonio de sus habitantes o, peor aún, su muerte.
Grrrrrrrr… De
hecho, de acuerdo con un documento de la Secretaría de Desarrollo Social, cada
año 90 mil hogares se instalan en terrenos de alta vulnerabilidad. En
Acapulco hay decenas de colonias irregulares
que han sido impulsadas por líderes delos diversos partidos políticos PRI, PRD,
PT, expuestas a inundaciones.
Grrrrrrrr… Luis
Walton Aburto, está obligado a proporcionar esos datos en el informe que
solicitó el presidente Enrique Peña Nieto y entregó este lunes en la Secretaria
de Gobernación, ya que los asentamientos fueron los dotados de servicios, a
pesar de ser incapaces de garantizar la seguridad de la población en el caso de
que se abatan sobre ellos fenómenos meteorológicos como Paulina, Henriette y Manuel .
Grrrrrrrr… Ojala
y se aprenda la lección que dejaron los
fenómenos mencionados, y las autoridades dejen de permitir que se lucre
con la venta de terrenos en lugares no aptos para vivir. Ante todo evitar que
se continúen vendiendo lotes por internet que son anunciados para uso
habitacional, o bien, para construir escuelas u hoteles, cuando se trata de una
zona inundable.
Grrrrrrrr… No
puede culparse a las personas que llegan a asentarse en lugares vulnerables,
muchas veces guiadas por “líderes sociales” sin escrúpulos. Los precaristas no
eligen por gusto fincar sus casas en las riberas de los ríos o las faldas de
los cerros; lo hacen por necesidad. Las responsables de que con ello se
coloquen en una situación de peligro son las autoridades que lo permiten por
conveniencia política o corrupción.
Grrrrrrrr… Sí,
Acapulco se perdió por su gente y las tragedias no cesarán mientras esta no
cambie. La forma en la que los afectan fenómenos naturales reflejan la forma de
conducirse en este puerto: los deslaves carreteros, las inundaciones y un
sinfín de otras consecuencias no se dan por otra cosa que no sean deslaves e
inundaciones anteriores, que nunca se arreglaron y que por ello cada tormenta
se aprecia lo mismo. Así de descompuestos están. La delincuencia se incrementó
bajo la complacencia de las autoridades pero también de ellos mismos. La
doctrina de negación de los problemas y de ‘esforzarse’ sin quejarse, sin
organizarse, viendo por ellos mismos, es la misma política que amenaza a México
y que quiere emular las mismas consecuencias. La condición más terrible de
Acapulco es que es la misma que podría observarse en todo el territorio
nacional.
Grrrrrrrr… Coincido
con David Augusto Sotelo Rosas, sobre el tema Los Miserables, retomando la obra
más famosa de Víctor Hugo en donde aborda la vida de los desgraciados, de los
infelices, de los abatidos, de los perversos, de los abyectos de París en el
siglo XIX (en el diccionario eso es lo que significa “miserable”. Se puede ser
millonario y ser, al mismo tiempo miserable, por ejemplo).
Grrrrrrrr… A
la vista de notas y fotografías pagadas, en varios periódicos de circulación
estatal, veo a personas desdichadas, infelices, desgraciadas por las recientes
tormentas. Gente abatida por haber perdido muebles y/o inmuebles o, peor, a sus
seres queridos. Y por otro, al igual que en la novela del gran novelista
francés, están los perversos, los abyectos y canallas que se aprovechan del
dolor y la desgracia de aquéllos. Los otros miserables.
Medrando
con la desgracia de gente humilde vemos a personas que, fingiendo una labor
social, “ayudando” a los damnificados.
Quieren mejorar su fortuna política aumentando su “popularidad” a través de
autogenerarse “reflectores” de los medios de comunicación.
Agárrense
piojos porque ahí les va el peine…
Periodista
y Analista Político
suriano13@hotmail.com Esta dirección
electrónica esta protegida contra spambots. Es necesario activar Javascript
para visualizarla
desdeabajo.aca@gmail.com Esta
dirección electrónica esta protegida contra spambots. Es necesario activar
Javascript para visualizarla
www.desdeabajo.com.mx
Síguenos
también en Twitter:@semdesdeabajo y en Facebook: Desde Abajo Aca
0 Comentarios