Alfredo
Sarabia Radilla
Es
muy difícil que sigan reteniendo en la cárcel, a Néstora Salgado García,
después de que un juez federal, la exoneró de los delitos imputados dolosa y
perversamente por el gobierno del estado de Guerrero, justificaciones causales
de su detención en agosto del año pasado y prácticamente, trasladada
inmediatamente en forma oculta,
silenciosa y alevosamente a un penal federal en el estado de Nayarit, específicamente a
Tepic, a pesar que allí, no era reclamada por la justicia de aquel estado.
No
obstante, al Gobierno de Guerrero, esta situación no le importó, y pasándose por “el arco del
triunfo” las leyes que interceden en estos asuntos, se la llevó lejos de su
terruño, adonde sus familiares más cercanos, no pudieran frecuentarla, lo que
ha sucedido.
Al
respecto, en este espacio del pasado 2
de septiembre, se reseñó lo siguiente: Se han reseñado las virtudes y bondades
de Néstora Salgado, se han visto videos que hablan de su trabajo y quehacer
como autoridad de la Policía Comunitaria de la CRAC en su pueblo natal
Olinalá, y no hay una sola explicación
convincente, que diga con certeza, la o las causas jurídicas y legales por la
que está presa, y más aún, el porqué está siendo sometida a una incomunicación,
como si fuera una presa de la más alta peligrosidad criminal.
Es
mucha la prepotencia y Autoritarismo del
gobierno del estado para hacer lo que está haciendo con la comandante de la
CRAC, y esto solo se explica en el apoyo
que este recibe del gobierno federal para combatir y desaparecer a las policías
comunitarias de los distintos poblados, que se han visto en la necesidad de defenderse mediante armas endebles, ante el azote descarado y cruel de
la delincuencia organizada, y ante la mirada ociosa, apática y displicente del
gobierno, tanto federal, como estatal y municipal.
Pero
no contento con ello, a la comandante de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) en Olinalá,
se le ha dado un trato muy degradante dentro de aquel penal, como si se
tratara de una criminal muy
peligrosa, incomunicada, muy, pero muy restringida para ver a sus familiares
más cercanos que la llegan a visitar, etc.
Se
puede afirmar categóricamente, que a Néstora
Salgado García, le están infringiendo un trato cruel, despiadado e inhumano, de
tal suerte que la amedrente, la asuste y por tanto, la desanime para eventos
futuros similares que dieron hincapié, a los efectos maquiavélicos que hoy está
sufriendo y padeciendo.
No
obstante, la coordinadora de la CRAC, ante las adversidades endilgadas, se mantiene de pié, como ella
misma lo ha dejado ver a través de una carta de su responsabilidad, dada a
conocer públicamente con motivo de los
festejos recientes del día internacional de la mujer.
En
este contexto de probada injusticia, el periódico Reforma on line, en su
edición del 2 de abril, informa: “La
coordinadora de la Policía Comunitaria en Olinalá, Néstora Salgado García,
quien se encuentra presa en un penal federal de Tepic Nayarit, así como el
promotor de la CRAC en Tixtla Arturo Campos Herrera, detenido en el penal de
máxima seguridad en Almoloya Estado de México, y el coordinador de la casa de
justicia en la comunidad de El Paraíso, Bernardino García Francisco, además de
cinco policías más que se encuentran encarcelados en el penal de Acapulco, podrían
ser liberados tras esta resolución del juez”.
Así
la situación jurídica, pronto veremos un poco del estado de derecho que tanto
pregona el gobierno, con la libertad de Néstora Salgado García y demás acusados
y detenidos injusta y arbitrariamente... HASTA PRONTO.
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