Alfredo Sarabia Radilla
El partido político movimiento de
regeneración nacional (morena), tendrá voz y voto en la Cámara de diputados a
partir del próximo mes.
Se habla de 15 diputados federales que representarán dignamente al nobel partido
político, del que se espera mucho, del partido que está cifrada la esperanza
política de un verdadero cambio de rumbo en la vida institucional de nuestro
país, donde no habrá espacio absoluto para la simulación que hoy campea
tranquilamente, en la búsqueda inobjetable del beneficio común de la Ciudadanía
de a pie, principalmente.
La bancada de los diputados de morena,
estará integrada por 9 diputados federales del Movimiento Ciudadano (MC),
cuatro del PartIdo del Trabajo
(PT), y dos del PRD, quince en total.
Sin embargo, pese a que tendrá derecho a recibir un presupuesto como
las otras siete restantes, no podrá gozar de todas las prerrogativas a las que
tiene derecho. Económicamente no se le dará la parte que le corresponde, pero
ese escollo es nada, y se continúa con esta situación, y pesará aún más, cuando
en verdad se ponga en práctica lo que
se pregona en morena, de ser un partido donde la congruencia de lo que
se piensa, se dice y se hace, debe prevalecer para poder tener autoridad moral
en lo que espera con ahínco.
Esta actitud de la futura bancada, nos
habla muy bien de esos legisladores, que
les vale que no haya prerrogativas monetarias para su desempeño camaral.
Debemos decir que esta situación se
precipitó, debido a que el dueño del MC, Dante Delgado, se molestó ante la
actitud antipriista legislativa, demostrada por el diputado Ricardo Monreal,
quién había venido fungiendo como coordinador de los diputados del MC.
Debes saber que el comportamiento contrario
al sentir Presidencial, le ocasionó a Monreal, ser destituido como coordinador
de la bancada del MC, de ahí que esta situación de morena, se empujara antes de
lo planeado, si es que ya hubiera estado entre las acciones del partido
aludido.
Es cierto que solo serán 15, pero también
es cierto que estará siempre presente en ellos, una cuestión que desde hace
muchos ayeres dejó de observarse en ese recinto Legislativo: LA DIGNIDAD.
Razón de más para que sus argumentos tengan
mayor peso específico y sean de verdades cabales para beneficios efectivos a la
población, básicamente a la de precarias condiciones de vida.
Estaremos pues, en el umbral de aquel decir
popular: “Solo el pueblo, puede salvar al pueblo”… HASTA PRONTO.
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