Historias de refugiados de Siria en Alemania; hombres, mujeres y niños que tratan de huir de la guerra civil que destruyó su ciudad, inspiran Asilo, pieza de la compositora mexicana Diana Syrse, la tercera de estreno mundial en Instrumenta Oaxaca 2015.
Obra para oboe/ corno inglés y sonidos electrónicos, es decir, pregrabados y procesados para la creación de efectos y para darles un sentido de desarrollo musical, como si se tratará de una orquesta electrónica, con un solista vivo: Alejandro Tello, oboe principal de la Orquesta Sinfónica Nacional, a quien está dedicada y quien la interpretará el domingo 15, a las 18:00 horas, en el Teatro Macedonio Alcalá, en el concierto denominado Música de Estreno.
Asilo o Asylum en latín, fue creada con entrevistas a personas que cuentan sus historias como refugiados, las experiencias y traumas que quedan después de la guerra. Así, las voces fragmentadas se vuelven parte de la electrónica “como almas que llegan rotas a su destino”, dice la autora. Los sonidos como bombas, misiles, disparos, gente que habla a través de un radio transmisor, etc., tomados de videos de la guerra real en Siria, han sido editados y transformados para darle vida a la electrónica que describe la situación.
“El oboe/corno inglés, simboliza a un hombre que huye y busca un lugar donde pueda encontrar paz, pensando en su propia familia, religión y creencias y tratando de enfrentar en el camino los recuerdos que quedaron como heridas y las dificultades que se encuentra al llegar a un lugar nuevo al cual hay que adaptarse”, agrega Diana Syrse.
Compositora de música clásica con lenguajes eclécticos aunque predominantemente moderna e incluyendo múltiples géneros, ópera, teatro, música para orquestas y ensambles de cámara, además de un uso frecuente de los recursos de la música electrónica; asimismo compositora de música ligera que podríamos denominar pop; cantante intérprete tanto de obras clásicas con su tesitura de soprano como de canción contemporánea, de corte latinoamericano, con acompañamientos tradicionales, pero, nuevamente, también con acompañamiento de electrónica en vivo.
Su última ópera Arsenikblüten, acerca de la violación y el aborto, fue presentada en una catedral de Alemnia, y su siguiente trabajo operístico (el tercero) tiene como tema los feminicidios y desaparición de tres casos reales en México. El texto es del escritor Alejandro Bahena y será interpretada por el sexteto vocal femenino Túumben Paax (Música Nueva).
La música de Syrse se ha interpretado en múltiples países y fue la primera mujer mexicana en dirigir y componer para el Palacio de Munich (Residez) apoyada por la Academia de las Bellas Artes de Munich. Sus estudios, que incluyen dos maestrías, la han llevado de la Escuela Nacional de Música de la UNAM al California Institute of the Arts (Calarts) y de la Indiana University, en Bloomington a la Hochschule für Musik und Theater en Munich. Entre otras especialidades creativas y de interpretación Diana Syrse estudió dirección de orquestas en Estados Unidos y en Alemania; en todos los casos, con eminentes maestros.
Música todavía “fresca” en conciertos estelares
El concierto que arropa el estreno de Syrse, es uno los momentos estelares de Instrumenta Oaxaca 2015 que tienen que ver con el estreno mundial de obras todavía frescas, comisionadas a compositores mexicanos que desarrollan una fructífera vida profesional en el extranjero. Los autores son músicos que investigan y experimentan; que extienden las posibilidades sonoras convencionales de los instrumentos, y exploran nuevas formas de crear y recrear música.
Apenas anoche, la obra Música para Oaxaca, escrita por Orlando Jacinto García para el Cuarteto Latinoamericano y dos guitarristas, fue estrenada durante un memorable concierto celebrado en el Claustro del Centro Cultural San Pablo, que tuvo como invitados a los guitarristas Jaime Márquez y Carlos Martínez Larrauri.
La trayectoria del autor no predecía una composición tan peculiar dedicada a Oaxaca: receptor de becas de las fundaciones Fulbright y Rockefeller, ganador de premios de composición en importantes foros y concursos de Estados Unidos y México, fue alumno, entre otros, del respetado compositor vanguardista Morton Feldman y su prolífica obra se ha tocado en países de Europa, Norteamérica y Asia. Ha sido, además, fundador y director de festivales y ensambles dedicados a la interpretación de música nueva. Actualmente es catedrático y director del área de composición musical en la Escuela de Música de la Universidad Internacional de Florida, en Miami, Estados Unidos.
El autor comenzó Música para Oaxaca durante una residencia artística realizada en agosto de 2015 en el Centro Internacional para Compositores (VICC) en Gotland, Suecia, y la concluyó en su estudio de la Universidad Internacional de la Florida (FIU). La base para la obra son ocho sonoridades que se oyen en diferentes órdenes, variaciones y constrastes. Las guitarras y el cuarteto toman turnos.
“Como en la mayoría de mi obra, explica el autor, el lento desarrollo del material musical tanto como el contrapunto entre el registro, las densidades y los timbres, son importantes consideraciones estéticas”.
En el concierto que abrió Instrumenta Oaxaca 2015, se estrenó Su aliento, su labio, su palabra o In ihiio, in iten, in itlahtol en náhuatl, una obra para orquesta de cámara, concebida por Mauricio Rodríguez como música de escena o como una breve ópera camerística. Cuerpo y movimiento son explorados en su dimensión musical. Los integrantes de La Orquesta Mexicana -para la cual fue compuesta-, además de tocar instrumentos tradicionales indígenas y mestizos realizan intervenciones sonoro-dramatúrgicas en el escenario al interpretarla.
Mauricio Rodríguez (1976) vive y trabaja en Berlín, además de haber realizado estudios en composición, piano y etnomusicología en el Taller de Creación Musical dirigido por Julio Estrada en la Escuela Nacional de música de la UNAM (México), tiene un doctorado en Artes Musicales en Composición por la Universidad de Stanford, donde trabajó como Brian Ferneyhough como asesor; y una maestría en Sonología en el Conservatorio Real de La Haya, en Holanda, donde estudió con Clarence Barlow (composición), Konrad Bohemer (música electrónica) y Paul Berg (programación de computadoras).
La escritura musical de este compositor está influida por procesos de representación gráfica, por una concepción multiparamétrica de sonido y la estructura musical, por procesos algorítmicos con bases intuitivas y por la experimentación. Su nueva obra “propone una transición de lo etéreo, lo mítico y lo espiritual, a la más pura abstracción de lo racional”.
Así, con estas tres nuevas obras preparadas para tocarse por vez primera en esta ciudad, Instrumenta Oaxaca 2015 enriquece su acervo de 120 obras comisionadas a lo largo de sus 12 años de existencia, como parte del apoyo a la creación musical y aliento a los jóvenes talentos.
0 Comentarios