El crear un jardín, explorar las relaciones familiares con este espacio, así como vincular la periferia de la ciudad de Hermosillo con lo doméstico, plantea el proyecto Manual para un jardín, propuesta del fotógrafo Alfredo Káram Orantes (Hermosillo, Sonora, 1980), becario del Programa de Estímulo a la Creación y al Desarrollo Artístico (PECDA) que se realiza con los auspicios de la Secretaría de Cultura del Gobierno Federal y las autoridades del gobierno de Sonora, en la categoría de Jóvenes con Trayectoria.
En entrevista, el artista, quien obtuvo en 2008 una beca de la Fundación Tierney en Estados Unidos, para llevar a cabo un proyecto con la asesoría de fotógrafos reconocidos, como Roger Ballen, Allen Frame y Javier Ramírez Limón, explicó que el propósito del Manual para un jardín es aprender de la naturaleza aplicando en la creación de un jardín plantas y elementos disponibles en Hermosillo, para así optimizar recursos y que la población se integre culturalmente a su tierra.
Me interesa ver el paisaje no como mera contemplación, sino como una generadora de cultura, dijo Alfredo Káram quien señaló que otro objetivo de su proyecto es provocar en las personas una inquietud por las plantas que están a su alrededor, tanto en la población que habita Hermosillo como la de otros lugares del estado y del país.
Crear un ambiente rodeado de naturaleza es benéfico en muchos aspectos, desde un lugar para el reposo y el esparcimiento, como también para la enseñanza y el cultivo de alimentos, comentó el fotógrafo de 35 años de edad.
El creativo, quien ha sido becario del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes (Fecas) 2004-2005, compartió que la realización del Manual para un jardín surgió tras las caminatas por zonas periféricas de Hermosillo. “Vi cómo la naturaleza siempre encuentra recursos para adaptarse a lugares y materiales producto del desecho humano o de construcción. Observar en zonas de desagüe que plantas endémicas crecen en unicel o sobre el concreto fracturado me llevo a trasladar esas observaciones hacia los patios encementados, pues podrían funcionar sin grandes recursos ni gran mantenimiento”.
Agregó: “Manual para un jardín está dirigido a todo público, sin embargo fue pensado para incidir y despertar un interés por la vegetación en la clase media hermosillense que vive en patios encementados”, dijo.
Manual para un jardín tiene tiempo de haberse iniciado, comparte Alfredo Káram. “Comencé a sembrar guayacanes y naranjos en un pequeño patio, después me enfoque en el paisaje de zonas periféricas, vertederos de basura, canales y zonas de desagüe; eso detonó aplicar observaciones y materiales en la construcción del jardín”, señaló.
El proyecto con beca del PECDA, el cual fue otorgado por la Secretaría de Cultura, a través de la Dirección General de Vinculación Cultural y el Instituto Sonorense de Cultura, actualmente se encuentra en su fase final: edición del manual previa a su impresión.
“La propuesta se modificó y tomó un rumbo hacia lo escultórico y plástico a partir de las mismas plantas, cuestión que abordaré al culminar la beca (febrero 2016)”, compartió el artista quien en 2014 participó en el Programa de Fotografía Contemporánea (PFC, Sonora).
Al referirse a la aceptación de su proyecto en la categoría de Artes visuales, Alfredo Káram expresó la necesidad de que instituciones otorguen programas y becas orientados a trabajos que incentiven ver dónde se vive y “quiénes somos”.
Como resultado de su proyecto, adelantó Alfredo Káram, realizará una muestra en la que exhibirá esculturas, contenedores de plantas, fotografías de registro y el manual.
Alfredo Káram Orantes ha participado tanto en exposiciones colectivas como individuales; fue seleccionado en la Bienal de Artes Visuales del Noroeste, en Sinaloa, y en la Bienal de Artes Visuales de Sonora. En 2011 expuso El sol no se mueve, en el Museo de Arte sonorense.
En diciembre de 2013 presentó a manera de slideshow un portafolio titulado Solares en la Ciudad de México, evento en el que participaron 30 fotógrafos nacionales, en el Laboratorio de Arte Alameda, organizado por el Centro de la Imagen. En 2014 presentó Adaptaciones, en El Rastro, espacio independiente del norte de México.
En 2015 participó en la exposición Existe lo que tiene nombre, en San Francisco Camera Work, exposición que itineró hacia Arizona, ASU Art Museum.
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