El muralismo sigue más vigente que nunca, coincidieron los pintores Eliseo Mijangos, Juan Manuel Villa Castellanos y Jorge Tanamachi, al participar en el Segundo Foro Internacional de Muralismo que se realiza en el Centro Nacional de las Artes (Cenart) de la Secretaría de Cultura.
Al participar en la mesa La metáfora renovada, los tres artistas compartieron con los asistentes su proceso creativo al momento de realizar sus obras en esta corriente de obra monumental.
Incluso coincidieron que el mural es para todos, pues se ubica en lugares compartidos y debe ser cobijado por las instituciones, debido a sus altos costos, no sólo de producción, sino también de conservación.
Eliseo Mijangos consideró necesario impartir cursos y talleres en donde se aborde la pintura mural, ya que en las escuelas de arte no existen clases de técnicas en este tipo de pintura, a pesar de la gran tradición que tiene el muralismo mexicano.
Recordó que junto con el Encuentro Internacional de Pintura Mural, que arrancó en 2008 en Guanajuato, se comenzaron a impartir cursos para el rescate de las técnicas tradicionales del muralismo, muchas de las cuales no son muy difundidas.
Los cursos, refirió, han tenido un gran éxito, pues no sólo participan artistas plásticos, estudiantes de arte y grafiteros, sino también médicos, herreros y amas de casa, quienes se dan a la tarea de crear murales con diferentes técnicas, como piroxilina, fresco y mosaico veneciano, y el que realizaron en 2015, titulado Alegoría de México, ya fue inaugurado en Quito, pues fue donado a Ecuador.
Por su parte, el también muralista y docente con más de 26 años de trayectoria, Juan Manuel Villa, reconoció que actualmente existe una falta de apoyo, no sólo para fomentar la creación de murales, sino para conservar en óptimas condiciones los ya existentes.
Luego de comentar sobre la realización de algunos de sus murales en su natal Jalisco, indicó que ahora ha optado por pintar murales abatibles, sobre papel o sobre tela, lo cual les da mayor movilidad y que un muralista es ante todo un alquimista que debe estar bien documentado para pintar sobre un tema.
Finalmente, Jorge Tanamachi agradeció la oportunidad de participar en este espacio de reflexión sobre la pintura mural que, destacó, es arte monumental que muchos piensan que ya pasó de moda y se necesita algo más nuevo, colorido, con técnicas más novedosas, cuando se trata de una tradición que tiene que ver con nuestra identidad y emociones, que señala de dónde venimos y quiénes somos.
Señaló que si bien el muralismo tiene ciertas similitudes con el grafiti, pues ambos se tratan de intervenciones monumentales de muros, uno es decorativo y permanente, y el otro es provocativo y efímero, pero lo que más los diferencia es el compromiso social que implica cada uno.
Si bien el muralismo se puede valer de ciertas técnicas del grafiti, como el esténcil, una forma de street art que ya usaba Siqueiros, lo más importante es que el mural escucha a la arquitectura y debe responder a ella, consideró Jorge Tanamachi.
El Segundo Foro Internacional de Muralismo, organizado por la Secretaría de Cultura, se llevó a cabo bajo el lema Los muralismos: apropiación y reconfiguración del espacio, e incluyó seis mesas de reflexión sobre este movimiento artístico con la participación de destacados especialistas.
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