Por José Manuel Gómez
• Entusiasma el respaldo del Presidente hacia el fortalecimiento de la infraestructura municipal.
Luego de la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a la ciudad de Acapulco, subsiste un real entusiasmo producto de los pactos adquiridos por el mandatario con la población porteña para solucionar el histórico problema del agua en el puerto. La visita del Ejecutivo federal estuvo marcado por una serie de protestas y exigencias por parte de diversos sectores de la comunidad.
Juan Abarca Alarcón, abogado de profesión, opina que este respaldo del presidente López Obrador al gobierno municipal de Acapulco y a la sociedad porteña es de celebrarse, pues históricamente el tema de la infraestructura, en especial el del agua fueron dejados en el abandono.
Recordó cómo, históricamente los gobiernos pasados, bajo la bandera del modelo neoliberal simplemente dejaron de realizar obras de capital importancia para cubrir las necesidades de la ciudadanía y llenó a los habitantes de la ciudad de promesas vacías sin la voluntad para cumplirlos, un ejemplo sería el periodo del ex presidente Felipe Calderón. Recordó que fue hace más de 15 años, en enero de 2005 cuando se dieron a conocer, con el anuncio de los trabajos en la planta de tratamiento de aguas residuales en Miramar, los últimos trabajos reales en la mejora del sistema de agua potable en el municipio.
Sobre las protestas realizadas en el marco de los actos de la gira de AMLO en el puerto de Acapulco, el abogado opina que detrás de estos actos hay una agenda, hay intereses de corte político.
“Me llama la atención que las mantas con las que recibieron al presidente y su comitiva solicitaban su ayuda y acusaban a la alcaldesa, lo cual siendo ambos del mismo me parece incongruente”. Señala que en su opinión hay una intención de hacer quedar mal a MORENA, partido al que pertenece la alcaldesa Adela Román Ocampo, consecuencia del próximo proceso electoral en puerta.
Puso como ejemplo el caso de las acciones por parte de los prestadores de servicios en la playa, en donde se exige acciones que no dependen de la primera edil, siendo que la franja de playa es considerada zona federal y el Ayuntamiento se ha limitado a cumplir con lo establecido. Indica que faltó acercamiento de los prestadores y las autoridades para entablar un diálogo, donde las partes pudieran dirimir sus diferencias.
Las manifestaciones se efectuaron y sin respetar las recomendaciones de distancia social y uso del cubreboca, todo esto en medio de una emergencia sanitaria, lamento que los intereses políticos priven sobre el bienestar de la ciudadanía, acotó el abogado.
Contrasta que el Presidente, resultado de las indicaciones sanitarias no podía exponerse ante la multitud, ya que hubo ciertos atisbos de caos, finalizó el entrevistado.
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